En el año 2005, durante mis estudios en el Colegio de Defensa Nacional, un instructor invitado, oficial de las Fuerzas Armadas de Brasil que permanecía en Honduras como parte de un programa de intercambio, describió ciertas categorías de países de la siguiente manera:
- Estados que alguna vez fueron potencias y que hoy no son nada. Entre otros, mencionó a España, Reino Unido, Francia
- Estados que creen ser importantes, pero que en realidad, no valen mucho. Dijo que dentro de ésta categoría están México, Argentina, Israel
- Luego, culminó con los países que verdaderamente están en proceso de convertirse en mega-potencias. El expositor destacó a Brasil.
Pero a medida que se torna "importante", asume el comportamiento que cuando "era débil" reprochaba a Estados Unidos: que actuaba de conformidad con la potencia de su músculo más que con la fortaleza de su derecho.
Hoy, Brasil se sabe grande, influyente, poderoso; pero no sabe cómo actúar en su papel de potencia. Mientras 'rechaza ultimátums de golpistas' acude lloriquendo al Consejo de Seguridad, pidiendo protección porque Honduras le amenaza.
Su conducta constituye interferencia en Honduras. Quien lo niega miente. Declaraciones atribuidas a funcionarios de Itamaratí así lo indican. Así lo afirma un ex-canciller brasileño, quien dice que la presencia de Zelaya en la embajada es una "papa caliente".
Creo que es el momento que los hondureños nos demos cuenta de nuestra propia valía: Si tantos se involucran y se interesan por nuestros asuntos, es porque valemos mucho.
Que Dios cuide a Honduras
